PROPUESTAS DE MEJORA DEL SISTEMA PÚBLICO DE SALUD 2020

junio 26, 2020

Este es un documento de consenso, el resultado final del grupo de debate iniciado hace algunos meses y publicado en este blog. Son prouestas para la mejora del Sistema Público de Salud, para la mejora de la salud de las personas.

Consenso quiere decir que profesionales de ámbitos diversos, aceptamos estos principios de mejora, aunque también quiere decir que podríamos discutir muchos de ellos y mostrar nuestro desacuerdo. Pero aquí están.

Está centrado en el modelo catalán, aunque estoy segura que muchas de las propuestas son aplicables y se pueden aprovechar para otros modelos.

He traducido las ideas fuerzas (a modo de resumen) del documento del catalán al castellano, así que si hay algún error en la traducción es mi responsabilidad.

Aquí los firmantes. Podiamos ser más y si no es así, seguramente es por falta de organización.

Amando Martin ZurroAlbert CañisCarlos A. GonzalezCarme Borrell
Carmen CatalanCarme VallsCesca ZapaterEmili Ferrer
Jordi ColomerRafael BarbaJoan BenachJoan Gene
Josep FarresJosep MartíJ-R. VillalbíLluis Rajmil
Maria José Fernandez de SanmamedMontse MontañaMaribel PasarinOlga Fernández
Rafael BarbaVicente OrtunXose Lopez de Vega

Además de la firma general, se crearon comisiones encargadas de redactar cada uno de los siete ámbitos en que dividimos el documento.    

Se presentará a autoridades, medios, instituciones y se difundirá también por redes sociales, como éste ejemplo en twitter.

Para leer el documento completo, en catalán, anoto dos links:

1.- Link a la Web del CAPS, en dónde está publicado.

2.- Link al pdf. Algunes propostes de millora del nostre Sistema Públic de Salut.


IDEAS-FUERZA DEL DOCUMENTO

VALORES DEL SISTEMA PÚBLICO DE SALUD

La Salud es lo que importa. Sabemos que los principales determinantes negativos de la salud deben afrontarse con políticas globales que están fuera de las competencias del Sistema Sanitario. Pero también es necesario y urgente un cambio radical del modelo sanitario, un cambio de paradigma, pasando de un Sistema Sanitario centrado fundamentalmente en la enfermedad y la medicalización a un modelo público de salud integral de las personas y la comunidad

CIUDADANOS Y PROFESIONALES
Los ciudadanos/as son los protagonistas de los servicios de Salud. Hay que impulsar políticas activas de reversión de la cultura de la medicalización entre ciudadanía, profesionales y políticos. Hay que empoderar a las personas en la protección de su salud con decisiones compartidas y fomentar la salud de la comunidad con el uso razonable de los servicios sanitarios.
Los profesionales están al servicio de estos protagonistas y su salud. Y para hacer bien esto, hay que velar por sus condiciones de trabajo y deben ser tenidos en cuenta en la gobernanza. Al mismo tiempo, mejorar su autonomía y corresponsabilidad con la incorporación de otros profesionales y competencias en el mundo de la salud  que se adecuen a los cambios producidos por la presencia de nuevos perfiles de pacientes.

ATENCIÓN PRIMARIA
Proponemos una atención primaria y comunitaria orientada a atender prioritariamente las necesidades de salud de la población con la colaboración del resto de agentes locales de salud y de la misma comunidad, gestionada con la participación activa de los profesionales y la ciudadanía, que realice una atención accesible, longitudinal integral, centrada en la persona y que también coordine el conjunto de intervenciones asistenciales.

HOSPITALES  DEL SIGLO XXI
No hacen falta más hospitales. Sí es necesario asignar recursos para mejora, mantenimientos y nuevas dotaciones planificadas. Planificar el terciarismo (habrá que definirlo) en pocos hospitales distribuidos por el territorio de Cataluña y hacer sinergias y alianzas entre comarcales y terciarios. El hospital debe retornar a la Atención Primaria, a los pacientes que no necesiten cama, alta tecnología o experiencia de especialistas de hospital.

PARA UN SISTEMA SOCIAL Y SANITARIO INTEGRADO
El modelo más efectivo para afrontar los problemas de salud vinculados a la cronicidad, el envejecimiento o pluripatologías que provocan pérdida de la autonomía, es un modelo integrado social y sanitario. Para avanzar en estos modelo será necesaria la definición y disponibilidad de los elementos instrumentales, sistemas de registro compartidos y guías de actuación social y sanitaria frente los casos más prevalentes: envejecimiento en soledad y necesidades complejas, riesgo o situación de exclusión social, infancia en situación de riesgo, adiciones y problemas de salud mental.

POLÍTICA DE MEDICAMENTOS
La industria farmacéutica tiene como prioridad el negocio y la enfermedad. La prioridad del Sistema de Sanitario debe ser la Salud y el cuidado de todas las personas, y por ello el Sistema de Salud debe ser totalmente independiente de los intereses de las compañías farmacéuticas y de productos sanitarios.

GENERO, SALUD Y SISTEMA SANITARIO
La salud de las mujeres es diferente a la de los hombres porque existen diferencias basadas en la biología. También es desigual porque los determinantes de la salud impactan de manera diferente en las mujeres a causa de los imperativos de género. Hay políticas que modifican los determinantes sociales y ambientales, con acciones específicas de promoción de la salud para las mujeres y con el reconocimiento de los derechos sexuales y reproductivos. Esta diferencia y desigualdad debe estar reconocida en los saberes y las prácticas de los Sistemas Sanitarios. Hay que eliminar las inequidades y el sesgo de género en la práctica médica para que los Sistemas Sanitarios no sean una fuente más de discriminación y violencias hacia las mujeres. Para lograrlo, hay que introducir la perspectiva de género en las políticas sanitarias, en la práctica clínica, en la docencia y en la investigación.

LOS DETERMINANTES DE LA SALUD
Hay que reconocer y planificar, desde los diversos gobiernos de las instituciones públicas, políticas globales para hacer frente a las desigualdades económicas y sociales, fundamentales como políticas de mejora de la salud y la equidad de las personas. Poner Salud en todas las políticas.

Olga Fernández Quiroga


Turbulencias en la “nueva” normalidad Covid-19

junio 16, 2020

Cuatro historias ordinarias

MARTA

Marta está preocupada por la vuelta al trabajo después de la pandemia mundial del virus Covid-19. Trabaja en un organismo semi-oficial. Trabajo precario. Se fue a casa el 14 de marzo con la precaución de llevarse la libreta de contactos. Ha pasado el tiempo. Teletrabajando. Con sus propios medios. En los servicios administrativos del organismo en el que trabaja, están ella y otra compañera. Ella ya tiene a sus hijos mayores, así que no la necesitan y puede apañarse, pero su compañera tiene niños pequeños a su cargo. No puede arreglarse de ninguna manera. Está preocupada por ella. Se ha ofrecido a trabajar presencialmente durante estos meses. Le han dicho que no. Le sabe mal. Está muy apesadumbrada. Su jefa ocupó en su día un alto cargo político en la Administración catalana. Ahora el cargo es menos importante. La llama a cualquier hora del día. Ella la atiende siempre.

CRISTINA

Cristina trabaja en un Ayuntamiento de unos 20.000 habitantes. También teletrabaja desde su casa. Pronto podrá volver a trabajar presencialmente, porque ya han empezado los turnos. Su pueblo ha ido pasando de fases, así que ya están los restaurantes abiertos. Ella observa a la gente en las terrazas, tomando sus cervezas, sus tapas, sus cafés con leche…y se siente mal. La gente en los bares y ella aún no puede volver con sus compañeros No sabe de dónde viene su malestar. Simplemente le parece un contraste…extraño. Entiende que a lo mejor esas personas que están en las terrazas igual viven solas y salir y poder tomar algo en el bar es como una salvación, que los bares y restaurantes necesitan abrir…sí. Quizás. Pero sigue sintiendo malestar. Hubiera preferido que todo el mundo estuviera en la misma fase. Que fuéramos todos juntos…

ANA

Ana cree que a ella aún le faltan bastantes días para volver. También trabaja desde casa. No sabría decir cómo está. Está bien, contesta cuando le preguntan. Y es verdad. Lo está. Tiene una buena casa, con la familia en armonía y todos bien, pero en realidad, pasan cosas. Está inquieta. Piensa en su amiga María. En unos pocos días, a su amiga Maria, se le han muerto los padres, se le ha muerto la suegra y su marido ha estado ingresado muy grave en la UCI (Unidad de Cuidados Intensivos) del hospital. El marido se está recuperando. No sabe qué decir.

MONTSE

Montse trabaja en una Administración autonómica, en un importante Departamento. Teletrabaja en casa. Sin medios, pero a tope. Quisiera poner horarios fijos a su teletrabajo y decir que no. No lo hace. Y no es por miedo, ni tampoco porque no le guste. Le gusta y además le va bien. Simplemente no puede decir no. Dentro de muy poco, a la vuelta presencial, los van a trasladar desde el lugar céntrico en el que estaban ahora, a un extremo de la ciudad, con muy mala combinación de transporte. Tardará el doble. No tienen contrapartidas. Todo le parece muy complicado. Y ahora con esto del coronavirus, aún mas. Duerme muy mal por primera vez en su vida.

Antes de seguir, un contrapunto optimista del niño Isamu (Isao Shirosawa) , en la deliciosa película de Yasujiro Ozu «Buenos días»

Sí, después de este «I love you», deciros que son cuatro historias de casos reales. Pequeños indicios. Historias ordinarias. Hay historias mucho más dramáticas en estos días (violencia doméstica, falta de alimentos, enfermedades, hacinamiento, soledad, muertes…)  Montse, Ana, Cristina, Marta, siempre dicen que están bien, excepto cuando pueden hablar un poquito acerca de cómo están. Y empiezan por lo más leve, lo más banal.

Hay algo muy inquietante, que inquieta, en ese objetivo que hemos llamado de la “nueva normalidad”. Cuando se contrasta con la realidad, aparece muy lampedusiano, “que todo cambie para que no cambie nada”.

Después del miedo, de la obediencia, del sacrificio, ¿Volvemos a lo mismo? ¿Sobrevivir? ¿No vivir? ¿No vamos a ir a una sociedad mejor? ¿Una situación inédita no va a conducirnos a una salida inédita?

¿Qué es lo que nos pasa? Lo que expresan estas historias le sucede a mucha gente. Hay una vertiente social, colectiva y una personal, subjetiva. Ambas con malestares justificados.

Seguiré/seguiremos con el tema.

Olga Fernández Quiroga