Gripe y calma: un grupo sanitario virtual ante la gripe A (2009-2010)

septiembre 6, 2010

Esta es nuestra entrada número 50 y lo queremos celebrar reproduciendo el último post de la iniciativa gripe y calma, tal y como han hecho otros muchos blogs.

Añadimos nuestro agradecimiento al excelente trabajo realizado (con Rafa Bravo a la cabeza por la iniciativa) y como dicen ellos mismos esperando que sólo sea el cierre del primer episodio y que el segundo y siguientes lo podamos escribir con guiones nuevos que no tengan que poner sentido común en dónde debería haberlo. Al menos es lo que deseo.

En la primavera y el verano de 2009, las noticias de los medios de comunicación sobre la denominada gripe A eran cada día que pasaba más frecuentes, alarmistas y agobiantes. El escenario que se pintaba era casi dantesco y las previsiones de las autoridades sanitarias apuntaban a una pandemia que segaría la vida de muchas decenas de miles de personas en todo el mundo.

Sin embargo, ya en agosto de 2009 se podía presumir que el desarrollo de la pandemia en el otoño-invierno boreal sería como el que había tenido lugar durante el invierno el hemisferio sur (Argentina, Australia, Chile, Nueva Zelanda, Uruguay y otros países) y en los últimos meses de la primavera en el hemisferio norte (Canadá, EE. UU., México y otros países). Tanto los datos epidemiológicos publicados, como nuestra percepción en el día a día, iban demostrando que la morbilidad y la mortalidad por gripe A eran menores incluso que las que correspondían a una epidemia gripal estacional habitual. Este benigno comportamiento contrastaba enormemente con el de las autoridades sanitarias, cuyos diversos y correlativos planes de contingencia (diferentes para cada comunidad autónoma) causaban un importante impacto en la organización de los servicios y en el coste sanitario, además de acrecentar la alarma social. De hecho, en las consultas de atención primaria se percibía un estado creciente de inquietud de la población. Ejemplos como consultas sobre el aborto voluntario para evitar daños con la epidemia de gripe o jóvenes asustados por la aparente especial susceptibilidad de éstos al “nuevo” virus, no eran raros en las consultas de medicina y enfermería.

Movidos por el cariz que estaban adquiriendo los acontecimientos, diversos profesionales del ámbito de la sanidad española (médicos de cabecera, pediatras, farmacéuticos, residentes de Medicina de Familia, estudiantes de Medicina y otros) cuyo único denominador común era el editar blogs y páginas web, decidimos tomar cartas en el asunto y agruparnos con el fin de buscar, analizar, elaborar y difundir información rigurosa y veraz sobre la pandemia de gripe A y sobre la respuesta más prudente y científica a la misma.

El movimiento empezó a mediados de agosto de 2009 y cuajó con el nombre, emblema y resumen de “gripeycalma”, pues lo que se pretendía era poner, ante la gripe A, tranquilidad en la población y los profesionales. El trabajo se llevó a cabo de forma coordinada utilizando nuevas tecnologías de comunicación en red, lo cual constituye una experiencia innovadora y quizá única en nuestro país. Como producto inicial del trabajo realizado, se difundió al unísono, tal día como hoy, en todos los blogs participantes en la iniciativa, un comunicado en el que se analizaba la situación epidemiológica y se proponían una serie de consejos dirigidos a la ciudadanía. Asímismo, se creó un blog (Gripe A: ante todo mucha calma) que sirvió como plataforma común del movimiento, desde donde se fueron poniendo a disposición de todos nuevos documentos (propuestas de organización, preguntas y respuestas), con traducciones a varios idiomas y en diferentes formatos (vídeo, presentación, hojas de divulgación, etc).

El eco a la iniciativa fue inmediato e intenso. Se sumaron más blogs, tanto de profesionales sanitarios como de población general interesada en la salud, hasta llegar casi a los 200, y la página del grupo tuvo, en apenas 3 meses, unas 80.000 visitas. Y, efectivamente, en la práctica se logró transmitir por la Red, a través de las comunidades virtuales, el mensaje que se buscaba ante la gripe A, de calma y tranquilidad, de sosiego y racionalidad, tanto a la población como a los propios profesionales sanitarios. El impacto llegó incluso a las autoridades, que moderaron su respuesta.

El final de la historia se puede escribir y de hecho lo estamos escribiendo al cabo de un año del nacimiento de la iniciativa. La gripe A tuvo su pico de mayor incidencia a mediados de noviembre de 2009 y ha sido una gripe suave, con escaso impacto en morbilidad y mortalidad. La llamada a la calma tenía pues fundamento científico y poco a poco se fue desvelando que los escenarios apocalípticos no tenían razón de ser. Solo esperamos que la experiencia de esta pandemia sirva para mejorar y manejar, de forma más eficiente y ponderada, crisis futuras, evitando, en la medida de las posibilidades, caer en un consumo desmedido de recursos – que siempre implica dejar de atender otros problemas – y en una desproporcionada oleada de pánico colectivo.

Este texto cierra el primer episodio de la unión temporal de blogs y páginas de profesionales sanitarios y de otros relacionados con la salud en la Red. Muchas gracias a todos los que han colaborado de una u otra forma y a los que han visto y sentido a gripeycalma como lo que es: una iniciativa profesional que ha buscado ir más allá de nuestras consultas y puestos de trabajo. Solo hemos pretendido llevar un mensaje de sentido común y a la vez científico a la población y a los profesionales sanitarios, comunicar nuestro saber y entender sobre un problema de salud, en este caso ante la gripe A. Gracias al trabajo de muchos y al poder que nos brindan las nuevas tecnologías de la información, se puede decir que lo hemos conseguido.

Unión temporal de blogs (UTB) Gripe y Calma

Los links a los post que hemos publicado en e-criterium sobre el tema
Gripe porcina y otras pandemias
Nombrar la Gripe: A/porcina/h1n1/nueva...
Patentes, vacunas, corrupción y otras cosillas

Olga Fernández Quiroga


Nombrar la gripe: A/porcina/H1N1/nueva…

noviembre 7, 2009

La lista es más larga. Mucho lío con el nombre, y es que poner un nombre, en este caso a una enfermedad, no es casual, ni inocuo.

Gripe A: remite a una vocal, simplemente. Si alguien quiere investigar, sabrá que quiere decir Virus tipo A y si quiere profundizar averiguará que el virus de la Influenza se clasifica en 3 tipos: A, B y C. El B y el C provocan cuadros autolimitados que no producen pandemias, mientras que el tipo A es el más peligroso debido a su alta capacidad de mutar, por lo cual se le relaciona con grandes pandemias. En este caso, este es un virus de la influenza tipo A que mutó. Vale, muy descriptivo, pero indica poca cosa.

Gripe H1N1: menos evocativo aún. La correspondiente investigación nos hará saber que las letras hacen referencia a la proteína Hemaglutinina y a la enzima Neuraminidasa y los números al tipo y representan la rapidez del contagio…todas cuestiones muy técnicas que remiten a los profesionales sanitarios, pero que para el resto de la ciudadanía, dicen muy poco.

nombrar la gripe editar

Gripe porcina: aquí ya cambia. Pensamos en animales, en cerdos y por poco que pensemos tal vez se nos ocurra preguntar que relación hay entre la gripe de los cerdos y los humanos, y si la hay cuál es, cómo se produce, en qué condiciones, por qué…y ya hemos puesto en marcha el proceso del saber: que la ciudadanía pueda hacerse preguntas y las instituciones, más allá de la respuesta inmediata al surgimiento de una enfermedad, puedan hacer una verdadera política de prevención para intentar ir a las causas y poner los medios necesarios para prevenir.

Porque ya tuvimos una gripe aviar, ¿recuerdan? .Y una enfermedad de las vacas locas que nos dio a conocer las peculiares prácticas canibalísticas que se utilizaban en la alimentación de los animales.

Un artículo de la revista Sin permiso, firmado por  Laura Carlsen, aborda detalladamente estas posibles causas y de paso explica el por qué del nombre.

Resalto: al parecer, los virus, que  no respetan la fragmentación de las competencias burocráticas entre diversos organismos, circulan rápidamente sin atender  a lo que dice el portavoz de la FAO, la Organización de las Naciones Unidas para los Alimentos y la Agricultura: “solo nos ocupamos de salud animal y no de salud humana”. Ese es el problema. Al menos, uno de ellos.

Olga Fernández Quiroga


Gripe porcina y otras pandemias

octubre 7, 2009

Si tenemos que preocuparnos por la pandemia de moda, la gripe porcina/A/H1N1, dedicándole mucho dinero público y exquisita atención mediática, porque se supone que eso es ocuparnos de nuestra salud, propongo que lean el artículo de Emilio Lledó, del diario El País Pandemia y otras plagas, para pre-ocuparnos, en el sentido de empezar a tomar conciencia, de otras pandemias más letales e insidiosas por su progresivo deterioro  cerebral; a saber: la corrupción política, los beneficiarios privados de lo público, el poder económico extrañamente extrañado de la situación económica de nuestro país, el abandono de la sanidad pública… más los que cada uno podamos añadir a raíz de nuestra reflexión. El mío: pensar que el miedo impulsará una ciudadanía pasiva, miedosa y poco participativa.